La capacidad de inspirar es la base de cualquier mensaje que busque movilizar hacia la acción en los tiempos de Instagram. Pero hay cosas que no cambian: la mejor manera de capturar mente y corazón sigue siendo con una buena historia y el medio más eficaz sigue siendo la expresión oral.
Solemos pensar que existen los tocados por la varita mágica, que tienen un carisma natural para hablar, y los otros que nunca serán buenos oradores. Pero todo el mundo puede ser un gran orador. Sólo se necesitan un mensaje a transmitir, el método idóneo y mucha, mucha práctica.
Los entrenamientos de Índole son el espacio en donde esos tres ejes se encuentran y se elevan a una nueva potencia.
La atención de las personas es el nuevo bien escaso del siglo 21. Las personas ya no se asombran con eventos tradicionales. Porque buscan inspiración. Porque quieren escuchar algo nuevo. Porque desean que los desafíen. Pero, por sobre todo, porque buscan eventos en donde cada asistente sea el protagonista.
Los eventos de Índole transforman a las organizaciones, creando historias que dejan huella en el tiempo y son imposibles de repetir.
En un mundo en donde la palabra "cambio" ya no alcanza para describir lo vertiginoso de los tiempos que corren; en un contexto en donde los estímulos superan a la capacidad de procesar información con propósito; en un presente en donde nos piden pensar diferente, pero nos evalúan por productividad; es ahí donde la innovación colectiva deja de ser una alternativa posible para convertirse en una necesidad imperiosa.
Lideramos procesos que atraviesan a la organización, sacudiendo el status quo, empoderando a los colaboradores, y posicionando a la empresa como agente de transformación hacia dentro y hacia fuera.